Hace dos años, en uno de nuestros editoriales comentábamos sobre la gran amenaza que representaban las aerolíneas que operan con el esquema “low-cost” en nuestro país. Asimismo, mencionábamos la necesidad imperiosa que las empresas de transporte terrestre entendieran que debían dejar de rendir culto a los vehículos para que de una vez por todas comprendieran que el culto se rinde al pasajero.
Algunas empresas han captado el mensaje: Cootranshuila presentó al poco tiempo su servicio Preferencial VIP, Cootracegua fortaleció su servicio Costa Line con los vehículos Volvo, Copetrán, Coomotor y Berlinas del Fonce reconocen los beneficios del sistema FICS para ventas por internet, Brasilia completará una inversión de 35 mil millones en su flota y recientemente tanto Flota la Macarena como Transipiales se han unido al club de los “Super-Preferenciales” al incorporar Wi-Fi, 2 Baños y tomacorrientes entre otras comodidades.
Bolivariano desde hace muchos años ha sido pionera en el manejo de las ventas por Internet, los planes de fidelización, las múltiples alternativas de pago y convenios, pero los usuarios sentían que algo faltaba en sus vehículos. La reacción no se hizo esperar y el proceso se ha venido realizando en dos etapas: primero con el servicio 2G, una reingeniería a su sitio web y una mayor interacción con el viajero a través de las redes sociales, para dar a finales de 2011 el golpe de escena al presentar el servicio 2G-Gold enfocado hacia el entretenimiento a bordo. Los buses de este servicio se encuentran de momento asignados a las rutas Bogotá-Medellín, Cali-Medellín y Bogotá-Cali, que tuvimos la oportunidad de probar, con motivo de la edición 35 del Congreso Nacional del Transporte, organizados por Asotrans.
A la llegada a la terminal de Bogotá, ya había salido el último 2G-Gold hacia Cali, entonces no queda más remedio que esperar hasta las 10:45PM para tomar un Super Expreso, aunque aprovechando que se ofrece un descuento al comprar los tiquetes de ida y regreso, de una vez se reserva silla en 2G-Gold para el viaje de regreso. La espera en la sala VIP es bastante tranquila siendo temporada baja y en la Terminal se encuentran más despachadores que viajeros.
El vehículo de ida es un Mercedes Benz OH1636 de 13.2 metros de largo carrozado Marcopolo Andare Class, sobre el cuál no hay mucho que decir, porque sus características de desempeño y confort son muy conocidas por conductores, transportadores y pasajeros. El vehículo tiene capacidad para 34 pasajeros, por lo que los 13.2 metros no se aprovechan totalmente, porque podría existir una fila más de asientos o un segundo sanitario, sin que se disminuya mucho la distancia entre las sillas que es bastante buena.
La marcha es suave y silenciosa, no se nota cuando la velocidad supera los 80Km/h, lo que casi nunca se presentó por la lluvia; entretanto se hace un poco difícil encontrar una posición para dormir y a veces quisiera que la silla estuviese a una mayor altura. No presentaron película aunque personalmente es preferible descansar, aprovechando que el volumen de la música es bastante bajo. Lo que fue un error imperdonable es no haber llevado un reproductor musical, elemento imprescindible que cualquier viajero debe tener como parte de su equipaje.
Se aprovechan los 20 minutos de parada en Ibagué para comer algo liviano a las 3:00AM y el segundo conductor toma el mando, se duerme por trayectos: entre Boquerón y Chicoral, entre Coello y el Alto de la Línea y entre Calarcá y Tuluá, donde el sueño ya no vuelve. Como el ritmo de viaje es tranquilo, la llegada a Cali tarda 90 minutos más de lo esperado, aunque hay que reconocer que los conductores nos transportaron con precaución hasta el destino.
Al llegar al terminal de Cali para tomar el viaje de regreso hacia Bogotá, la sala VIP está llena y naturalmente son los pasajeros que esperan el mismo viaje de las 10:00PM en el 2G-Gold, la hora anunciada es realmente a la que se empieza a abordar el bus, haciendo que el viaje inicie realmente a las 10:30PM. De momento, todos los 2G-Gold tienen carrocería Marcopolo Paradiso, y la mayoría tienen el chasís Chevrolet LV150, cuyas características de precio, mecánica sencilla, conocida y confiable captan el entusiasmo de conductores y transportadores.
Para este viaje el vehículo es uno de los modelos 2011 (que iniciaron el servicio 2G) y que en 2012 recibieron la actualización del interior para ofrecer los sistemas de entretenimiento y conectividad a bordo. Durante la espera se conectan los audífonos nuevos que estaban listos en cada puesto, configurar la conexión a internet Wi-Fi, encender el monitor y esperar a que termine el video que explica cómo usar los sistemas de entretenimiento, aunque el manejo de los mismos es muy sencillo e intuitivo por lo que rápidamente se pueden controlar las funciones.
La salida de Cali hacia Yumbo es bastante rápida y parece que el viaje de regreso será más rápido que el de ida, se prueba la conexión a internet encontrándola con buena velocidad y sin demoras para procesar lo que se quiere buscar. Luego la compañía en ruta, se hace la búsqueda de los diferentes géneros musicales, la calidad del audio es buena, aunque se esperaba que la cantidad de pistas por género fuese más amplia, aquí se evidencia aún más el error de no incluir en el equipaje un reproductor de música, toda vez que un viaje como este puede durar hasta 12 horas cuando se presentan congestiones y las canciones no alcanzan a ser suficientes, especialmente si se quiere escuchar un sólo género musical o un artista específico.
Con las películas a bordo la calidad es buena, pero también se esperaría una mayor selección, y un control remoto iluminado sería bienvenido, para no incomodar a quien ocupa el puesto vecino al encender la luz de lectura. Al llegar a Buga y tomar la autopista hacia la Uribe el conductor logra tener un ritmo más constante, lo que permite guiar a otro paradiso LV150 de Fronteras, el cuál desaparece después de pasar por el peaje de Corozal, en los límites entre Valle y Quindío.
Es la 1AM y al llegar a Calarcá, creemos que a las 7:00 AM llegaremos a Bogotá y comienza el ascenso al Alto de la Línea, en este momento sólo unos 4 pasajeros aún están despiertos, y en algunos momentos la velocidad no superó los 25Km/h siguiendo el lento andar de los camiones, el conductor utiliza las luces estroboscópicas para abrirse paso y ser visto por quienes descienden hacia Calarcá. El helaje de la cabina es alto y se extraña no contar con cobijas, siendo este un elemento de confort tan importante como los sistemas de entretenimiento instalados, adicional a ello es fácil confundirse los botones para cambiar algunas funciones con el control remoto en la oscuridad, a menos que se enciendan las luces de lectura.
Al comenzar el descenso hacia Cajamarca, llega el sueño que sólo es interrumpido brevemente cuando el bus se detiene en esta ciudad a realizar el cambio del conductor, al pasar por la variante de Girardot y pagando el peaje de Chinauta hasta llegar a Chusacá a las 6:30 AM.
Lo que no estaba en las cuentas era la hora y media que toma desde este punto, llegar a la terminal del Salitre, por las congestiones del paso por Soacha, Bosa y la estrechez de la carrera 86 que conecta con la Avenida de las Américas. Finalmente a las 8:00 AM el bus llega a la terminal, nos despedimos de su conductor, una toma de fotos hasta que terminan de entregar a los demás pasajeros el equipaje alojado en la bodega pasante del bus. No se presentan congestiones al pasar por la puerta de llegada de pasajeros.
En suma el viaje es agradable y el hecho de estar durmiendo entre el bus no genera sensación de cansancio. El resultado es satisfactorio y quedan las ganas de volver a viajar, de otra parte los aspectos a mejorar reseñados en esta crónica deben estar siendo considerados por la empresa, y las empresas deben comprender que hasta ahora comienzan a esforzarse para que las personas prefieran tener “los pies en la tierra”, y continuar con otro round en la pelea entre las aerolíneas de bajo costo y las empresas de transporte terrestre que sí se han puesto a la tarea de cuidar y reconquistar sus clientes.
Saludos en Movimiento!
Nos Gustó
- Descuento ofrecido en la compra.
- Espacio entre sillas.
- Marcha silenciosa
- Sala VIP bien dotada.
- Conducción tranquila y cuidadosa en ambos trayectos.
- Manejo sencillo de los sistemas de entretenimiento.
Nos Gustaría
- Cobijas.
- Selección musical y de películas más amplia.
- Control remoto iluminado.
- Películas más recientes.
- Baños independientes para damas y caballeros.
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